México, 23 dic (PL) Con la inscripción del Archipiélago de Revillagigedo y la Charrería en 2016 como patrimonios mundial y cultural inmaterial de la Humanidad, respectivamente, México descuella hoy como la nación americana con más bienes reconocidos por la Unesco.
Figura además séptimo del orbe por tales reconocimientos del organismo mundial, aseveró este viernes el Instituto Nacional de Antropología e Historia en un comunicado.
La primera declaratoria de este año se dio a conocer el 16 de julio en la 40 reunión del Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco (Fondo de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) en Estambul, Turquía.
El citado archipiélago está ubicado a 661 kilómetros de Manzanillo, en el estado de Colima, y lo forman las islas Socorro, Clarión, San Benedicto y Roca Partida.
Con este bien natural, protegido por las leyes nacionales desde 1994 bajo el carácter de Reserva de la Biosfera, México tiene 34 sitios inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial.
De ellos, 27 son culturales, seis naturales y uno mixto (la Antigua Ciudad Maya y el Bosque Tropical Protegido de Calakmul, en Campeche).
En lo concerniente al legado intangible, la Unesco reconoció el 1 de diciembre pasado los atributos universales y excepcionales de la Charrería como «arte ecuestre y vaquero tradicional de México».
Esta práctica tuvo sus orígenes hacia el siglo XVI para crear vínculos sociales entre los vaqueros de diferentes fincas que se reunían para inventariar y marcar el ganado de cada propiedad.
México obtuvo con ello su octava inscripción en la Lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, en la que también están las Fiestas Indígenas dedicadas a los Muertos, la Cocina Tradicional Mexicana y el Mariachi, entre otros bienes.